Si bien es esencial implementar Buenas Prácticas Regulatorias, asegurar su implementación es a menudo un desafío mayor para los gobiernos. Un organismo central de coordinación que gobierna la rendición de cuentas y la coherencia en el proceso regulatorio, es el mecanismo más eficaz para implementar la supervisión regulatoria y mejorar la regulación.
De la misma manera que las empresas implementan sistemas de gestión y control de calidad para sus operaciones, productos y servicios, un Organismo Central de Coordinación Regulatoria es el sistema de gestión y control de calidad para los procesos regulatorios y regulaciones de un país.
Los beneficios de un organismo de coordinación central incluyen:
La mejora de la coordinación regulatoria
Un organismo central de coordinación proporciona a los reguladores, que tienen misiones focalizadas, una perspectiva objetiva y transversal que mejora la coordinación entre los diferentes organismos gubernamentales involucrados en el proceso regulatorio. Esto ayuda a evitar los efectos negativos que surgen bajo un sistema administrativo fragmentado.
Asegurar la responsabilidad política y la credibilidad regulatoria
Un organismo de coordinación central asegura que las regulaciones individuales apoyen las prioridades de política de un gobierno, al tiempo que mantiene la credibilidad de la revisión regulatoria a través de su independencia y experiencia. Por un lado, puede garantizar que las regulaciones propuestas sirvan a los objetivos de las políticas de un gobierno al revisar las regulaciones individuales y sus AIR, al mismo tiempo que emite pautas de agencia basadas en un conocimiento privilegiado de la agenda del gobierno. Por otro lado, cuando el asesoramiento de expertos difiere de las prioridades de un gobierno, el organismo de supervisión puede explicar los impactos y las compensaciones de las decisiones políticas sobre el análisis técnico a los que toman las decisiones. “Un organismo central de coordinación… se ve cada vez más como el mecanismo más eficaz para implementar la supervisión regulatoria y mejorar la regulación.”
Mejora de la coherencia regulatoria
Un organismo central de coordinación mejora la calidad de la regulación aplicando un control de calidad consistente y coherente, además de proporcionar análisis, directrices y apoyo regulatorios. No solo asegura el uso de criterios consistentes y coherentes durante el proceso de revisión regulatoria, sino que también puede ayudar a los reguladores a mejorar la calidad de la regulación al emitir guías para un análisis sólido y un proceso regulatorio consistente.
Sensibilización pública sobre la regulación
Un organismo central de coordinación sensibiliza al público sobre la calidad y la mejora de la regulación. Está bien posicionado para participar en la comunicación externa, pidiendo la participación de las partes interesadas y agregando aportes diversos para dar forma a una mejor regulación.
Facilitar la cooperación regulatoria internacional
Con la autoridad apropiada, un organismo central de coordinación puede facilitar y mejorar la participación internacional al eliminar las divergencias y barreras regulatorias innecesarias, al tiempo que logra la coordinación de los objetivos regulatorios entre países.
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MIEMBROS PRINCIPALES DE LA COALICIÓN REGULATORIA
